Directrices de la Diócesis de San Cristóbal para la Semana Santa 2021

Directrices de la Diócesis de San Cristóbal para la Semana Santa 2021

AL PRESBITERIO DE SAN CRISTOBAL Y A LOS MIEMBROS DEL PUEBLO DE DIOS QUE EDIFICAN EL REINO EN EL TÁCHIRA

“SALUD Y PAZ EN EL SEÑOR JESUS”

Cercanos como estamos de la Semana más importante del año litúrgico, seguimos nuestro camino cuaresmal en preparación a la conmemoración de los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús, el Señor. Con toda la intensidad de nuestro testimonio, fortalecido por las prácticas cuaresmales, nos disponemos a experimentar, precisamente, la fuerza renovadora de la Pascua liberadora de Jesucristo, el Hijo de Dios y Salvador.

Aunque con un poco de mayor flexibilización que el pasado año, en el actual momento hemos de realizar las celebraciones de la semana Santa atendiendo a la situación de pandemia que sigue azotando a la humanidad y tomando en cuenta las diversas directrices que se han dictado para las celebraciones litúrgicas y acciones evangelizadoras en nuestras parroquias, comunidades eclesiales de base, lugares de culto y otras instancias eclesiales. Se mantienen vigentes las mismas, a la vez que pedimos se cumplan, mirando siempre el bien de todos.

Por eso, a las directrices ya conocidas y puestas en práctica incorporamos algunos lineamientos y sugerencias. La finalidad es favorecer en todo momento la adecuada participación -presencial y en modo virtual- de toda la feligresía diocesana.

  1. La prioridad más importante es la de enfatizar que durante esta semana Santa, como es tradición de la Iglesia, celebramos el misterio central de nuestra fe: el misterio de la Pascua de Jesús, con la cual, liberados de la oscuridad y muerte del pecado, entramos en el camino de la novedad de vida (cf. Rom. 6,4) y nos convertimos en “hijos de Papá Dios” (cf. Jn 1,12).
  2. En todo momento hemos de insistir, por todos los medios disponibles, que se trata de un tiempo de gracia, para la oración, la reflexión y la conmemoración de los misterios de la fe. Es un tiempo propicio para renovarnos en el Espíritu del Señor. Por eso, es necesario enfatizar su importancia haciendo ver que no es un tiempo para actividades de carácter profano y mundanal.
  3. Nuestra intencionalidad evangelizadora se dirige a promover en todos los creyentes en Cristo una verdadera conmemoración del misterio pascual. Para lo cual hemos de valernos de todos los medios disponibles a fin de que cada comunidad, cada familia, cada instancia eclesial y cada persona pueda celebrar eclesialmente la semana santa y hacer de ella un tiempo de gracia que enriquezca a todos en la propia vida según el Espíritu a la cual estamos llamado.
  4. Como ya se indicó, se deben guardar y respetar todas las directrices ya conocidas y vigentes: así, al cumplir con las normas de bio-protección (de distanciamiento personal, el aforo permitido en cada templo, el lavado de las manos, etc.) estaremos ayudando a la prevención ante la pandemia de la covid-19. Es importante, que en estos días también se intensifique la desinfección de los lugares sagrados o de los espacios donde se realicen las celebraciones litúrgicas y actividades de evangelización.
  5. En esta misma línea, para favorecer a toda la feligresía (y particularmente a quienes tienen más dificultades para movilizarse) es necesario intensificar la transmisión de las celebraciones, de los mensajes y reflexiones, de las enseñanzas y otras acciones de carácter evangelizador a través de los medios de comunicación y las redes sociales. Gracias a Dios y con el esfuerzo de los sacerdotes y laicos en las diversas parroquias, hemos podido abrir espacios para esta hermosa tarea, con la cual la Palabra de Dios ha podido llegar a todos los lugares de nuestra Diócesis. La oficina de Prensa de la Diócesis promoverá y coordinará programas audiovisuales para apoyar la labor en cada comunidad.
  6. Es necesario seguir insistiendo en el protagonismo de la familia COMO IGLESIA DOMESTICA: En ella, al valerse de los medios audiovisuales y de otros subsidios, se deben seguir realizando encuentros de oración, de celebración y de formación permanente. Pedimos a todos los sacerdotes y laicos comprometidos en la misión evangelizadora de la Iglesia Diocesana que sigan trabajando en esta misma línea buscar los mejores modos de acompañar a las familias y comunidades eclesiales de base.
  7. Según indicaciones de la Santa Sede, este año, no se deben sacar imágenes en procesión. No hay excepción de ningún tipo
  8. Junto a estas directrices de carácter general, presentamos algunos lineamientos para los diversos días y celebraciones de la Semana Santa. Cada párroco, mirando las propias circunstancias, adapte el horario de las diversas acciones durante esta semana santa, mirando siempre la mejor participación de todos, sea de forma presencial o virtual:
  9. MISA CRISMAL: Como ya sabemos, se celebrará el próximo 25 de marzo junto con la ordenación presbiteral de tres diáconos en la Capilla del Seminario Diocesano (10.00am). Por las razones que conocemos, agradecemos que sólo vayan los presbíteros (diocesanos y religiosos), sin acompañantes. Ese día, sobre todo los sacerdotes que viven lejos del área metropolitana, podrán recibir los óleos bendecidos durante la celebración eucarística. Se seguirán las mismas medidas ya aprobadas para el seminario.
  10. DOMINGO DE RAMOS: Se deben tener en cuenta los siguientes puntos:
  11. Conviene que se haga una sola bendición de ramos en un lugar abierto (plaza, calles aledañas al templo, etc.), guardando el distanciamiento personal exigido (un metro y medio a dos metros de separación entre las personas).
  12. Dadas las dificultades que se pueden tener para conseguir los ramos, es conveniente sugerir a quienes vayan a asistir que cada uno lleve su palma, una plantita o un ramo de flores. Lo importante es el símbolo que se pretende mostrar: una manera pública de reconocer a Cristo Rey.
  13. Es recomendable que la celebración eucarística donde se bendigan los ramos se realice en el mismo lugar. Como ya se indicó no debe haber procesión de ramos por las calles ni hacia el templo.
  14. Es conveniente pedir a todos los miembros de la comunidad eclesial que, en las ventanas o puertas o lugares visibles de sus hogares (casas de habitación, apartamentos, etc.) desde primeras horas de la mañana hasta el atardecer, coloquen un signo que muestre la propia adhesión y reconocimiento a Cristo Rey (la bandera de la Iglesia y/o de Venezuela, un ramo de flores, un ramo o palma, una imagen de Cristo Rey o del Sagrado Corazón).
  15. Las otras celebraciones que se realicen deben guardar las directrices ya conocidas.
  16. LUNES-MARTES-MIERCOLES SANTOS: Son tres días de inmediata preparación al Triduo Pascual. Cada parroquia organizará las actividades particulares, siguiendo las directrices respectivas. Algunas sugerencias para ser tomadas en cuenta:
  17. LUNES SANTO: Generalmente, sobre todo en el área metropolitana, se ha dedicado este día para una intensa jornada de confesiones.  Es importante tener en cuenta la modalidad que se tendrá este año 2021:
  18. Desde las 7.30 am hasta la 1.00 pm, en el atrio de la Catedral y la Plaza Juan de Maldonado, se tendrá una jornada para que los fieles que deseen puedan acudir al sacramento de la reconciliación.
  19. Pedimos a todos los sacerdotes diocesanos y religiosos que acudan en ese horario para así multiplicar las posibilidades de atender en confesión a los fieles que acudan ese día. Les agradecemos que estén todo el tiempo que sea necesario y desde el inicio. Cada sacerdote debe traer su “tapabocas” y, de ser posible, la mascarilla de plástico
  20. El párroco de la Catedral, con sus colaboradores laicos y de otras parroquias, cooperarán en el orden de la jornada.
  21. En cada parroquia se tendrán también otras jornadas para confesiones.
  22. Recomendamos vivamente a los sacerdotes poder ir donde los enfermos y ancianos que lo requieran (durante esos días) para la confesión y unción de los enfermos.
  23. MIERCOLES SANTO: es tradición que este día muchos feligreses, devotos del Nazareno, acudan a los templos para orar ante la imagen del Señor con la Cruz a cuestas. Cada parroquia debe organizar las celebraciones con las medidas y directrices ya conocidas. Se recomienda que la imagen del Señor Nazareno, sea expuesta en un lugar visible (por ejemplo, el atrio de los templos, o la plaza frente a los templos) para la veneración de los fieles. Con la ayuda de cooperadores, se pueden organizar “caminerías” para facilitar la asistencia de los que allí acudan y evitar todo tipo de aglomeración. Se recuerda que, por disposición de la Santa Sede, no se puede sacar en procesión la imagen del Nazareno.
  24. TRIDUO PASCUAL: Se debe seguir insistiendo en la centralidad de estos días y la importancia para la vida cristiana y eclesial.
  25. JUEVES SANTO: Se deberá guardar todo lo previsto en las directrices sobre las medidas de bio-protección. Es necesario tener en cuenta lo siguiente:
  26. La celebración del Jueves Santo se puede realizar a partir del mediodía en cada comunidad parroquial. Así se puede facilitar también la visita al monumento durante el resto de la tarde hasta primera hora de la noche. Se recomienda que ya alrededor de las 7.00pm no haya celebraciones ni jornadas de oración en los templos.
  27. Los monumentos deben distinguirse por su belleza y sobriedad. Conviene que se puedan elaborar en sitios del templo donde se pueda tener un aforo permitido, y así se evitarán las aglomeraciones.
  28. Se prescinde del lavatorio de los pies.
  29. Donde sea posible, es oportuno realizar gestos de caridad hacia personas necesitadas o vulnerables (por ejemplo, llevar alimentos a enfermos, familiares, personal médico y de enfermería en los centros de salud, etc.). Será un gesto que expresa públicamente el amor fraterno como mandamiento nuevo para los cristianos.
  30. VIERNES SANTO: Conmemoración de la Muerte del Señor.
  31. No se permiten los VIA CRUCIS por las calles en forma de procesión. Cada parroquia puede organizarlos valiéndose de los medios de comunicación, redes sociales, altavoces desde los campanarios, etc.
  32. Asimismo, la predicación de la meditación a partir de las siete palabras del Crucificado.
  33. No se permiten tampoco las procesiones con el santo Cuerpo.
  34. La conmemoración de la Muerte del Señor se puede realizar a partir de las 3.00 pm; pero no más tarde de las 5.00pm.
  35. Se recomienda vivamente que en esa conmemoración y en otro momento, los fieles puedan ofrecer su colaboración económica para los lugares santos, según mandato de la Iglesia Universal.
  36. SABADO SANTO: Día de oración y reflexión ante el misterio de la muerte y sepultura del Redentor.
  37. La celebración de la Vigilia Pascual se puede realizar a partir de las 5.00pm y, a más tardar a las 8.00pm.
  38. La bendición del fuego se realizará dentro del mismo templo, valiéndose para ello de los medios más prácticos.
  39. Se debe guardar todo lo referente a las directrices de bio-protección ya conocidas por todos; en especial lo referente al aforo para la participación presencial de los fieles
  40. Es muy recomendable pedir a la feligresía que, durante la noche, en cada uno de los hogares y de manera visible se pueda colocar un cirio o una vela encendida para simbolizar que se celebra la explosión de la luz del Resucitado.
  41. DOMINGO DE PASCUAL: Celebración de la Resurrección.
  42. Cada comunidad parroquial organizará las celebraciones eucarísticas según las directrices pertinentes.
  43. Es importante invitar a todos para que en sus hogares coloque un símbolo que muestre la fe en el Resucitado: la bandera de la Iglesia y/o de Venezuela, un ramo de flores, una imagen de Jesucristo, etc.
  44. Donde sea posible y guardando las debidas medidas de bio-protección puede organizarse una “olla comunitaria” destinada particularmente a los más necesitados, a los migrantes que pasan por nuestras carreteras y calles…
  45. Este tiempo de cuaresma previo y los días de semana santa constituyen un momento para profundizar en el misterio de Jesús, el Redentor. Vivimos una época signada por la prueba, originada tanto por la pandemia como por la crisis que golpea nuestra nación. Al hacernos eco del mensaje de Cuaresma del Papa Francisco, nos corresponde alentar a todos en la fe, la esperanza y la caridad.
  46. El tiempo litúrgico de la Pascua debe ser vivido con el gozo nacido del resucitado y debe fortalecer nuestro testimonio de vida cristiana. Así, haremos realidad la “alegría del Evangelio” y podremos seguir tomando fuerza y entusiasmo para hacer realidad en nuestra región el Reino de Dios, que lo es de paz, justicia, libertad y amor.

Con nuestro saludo y bendición,

+MARIO MORONTA R., OBISPO DE SAN CRISTOBAL

+JUAN ALBERTO AYALA RAMIREZ, OBISPO AUXILIAR.

SAN CRISTOBAL, 14 DE MARZO DEL AÑO 2021.

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